Además del lanzamiento de Windows 10 anunciado para este verano, grandes ambiciones en el mercado chino y una mano tendida hacia los piratas informáticos, Microsoft también presentó Windows Hello esta semana. Este nuevo sistema de autenticación biométrica tiene como objetivo que las personas olviden las contraseñas.
Mientras Yahoo! intenta contraseñas temporales, Microsoft solo está tratando de hacerlas desaparecer de la vida cotidiana. Con Windows Hello, que es parte integral de Windows 10, la firma de Redmond presenta un método de autenticación biométrica que pretende ser perfectamente versátil. De hecho, puede basarse en un reconocimiento de huella dactilar, facial o de iris, y no se limita a los servicios incluidos únicamente en Windows: virtualmente puede reemplazar cualquier autenticación por contraseña en un servicio de terceros utilizando Windows Passport.
En la práctica, el uso de estos servicios es relativamente simple. Para abrir su sesión, el internauta se posiciona frente a su cámara web, por ejemplo, para que esta pueda confirmar que efectivamente es el rostro del propietario. Posteriormente, para acceder a sitios o aplicaciones que requieren una conexión a una cuenta, Windows Passport reemplaza la interfaz habitual que requiere un identificador previamente definido con el servicio. Concretamente, esto significa que Windows 10 requerirá un código PIN o un nuevo control a través de Windows Hello si el dispositivo está equipado con los sensores necesarios.
Por desgracia, es un poco el punto débil del dispositivo anunciado por Microsoft. Efectivamente, muchas máquinas se preparan para beneficiarse de una actualización gratuita al último SO de la firma, y está claro que muy pocos PC comercializados en los últimos años llevaban lector de huellas dactilares, iris o incluso una webcam 3D, como el Intel RealSense F200. propuesto por Microsoft. De hecho, la mayoría de los usuarios de Windows 10, por lo tanto, al principio, solo tendrán un uso muy limitado, si es que tienen alguno, de Windows Hello.
Pero eso no impide que la firma crea en el vuelo de su solución. Además de la confiabilidad anunciada como extremadamente alta, destaca una evidente superioridad en términos de seguridad frente a las contraseñas, que pueden ser pirateadas constantemente. Asimismo, insiste en que Windows Hello se basa en la pareja máquina + usuario, y no en datos almacenados en línea. En otras palabras, toda la autenticación se realiza localmente, sin comunicación con la red y, por lo tanto, sin riesgo de interceptación. En resumen, según Microsoft, "es una solución que el gobierno, la defensa, las finanzas, el cuidado de la salud y otras organizaciones usarán para mejorar su seguridad general".
